junio 11, 2007

Olvidarte

Dalí
“Procuro olvidarte siguiendo la ruta de un pájaro herido, procuro alejarme de aquellos lugares donde nos quisimos, me enredo en amores sin ganas ni fuerzas por ver si te olvido y llega la noche y de nuevo comprendo que te necesito”. Procuro Olvidarte. Canción de Hernaldo Zúniga


Salgo de la casa sin mirar atrás. Me duele el pecho cuando volteo. Me veo salir como un fantasma gris, como una alma en pena, como una aparición siempre a la misma hora de las últimas noches, desde hace muchas. Me veo desgastada, borrada, vacía, sola. Los perros ya ni me ladran, se cansaron de mover la cola sin lograr efecto en mí, más que la mecánica acción de alimentarlos, ellos no entienden, ni yo, ellos no tienen la culpa, ¿y yo?. Salgo sin voltear, pero mis pies pesan toneladas de oscuridad, pesan cemento que me hunde en el portal, justo sobre la alfombra que antes decía “bienvenidos” y que ahora, a causa de las hojas y las semillas dejadas por los pájaros solo deja entrever el adiós de “idos”.

Llevo en una mano la escoba, que solía utilizar para barrer y volar en los buenos tiempos y una cubeta en la otra, con la esencia que pude recoger de lo que dejaste, tu perfume de diseñador, el que mencionaste querías cambiar y yo no entendí por qué si a mí tanto me gustaba, la franela blanca que usabas para dormir y que cuando te la ponías era la excusa contraparte de mis ausentes dolores de cabeza en las noches, una botella de whiskey a medio terminar, tu cepillo de dientes, unas notas de trabajo, un… un…, ¡Dios!, ¡Nada!, eso me dejaste… ¡Nada!... Y esa cosa aquí en el pecho instalada, ese signo de interrogación gigante, !Maldición!, !Maldición!... Nada porque es nada como me siento, porque este vacío debe ser contrario a todo…

Ayer salí con aquel de quien nunca me celaste, me imagino que no representaba peligro, me imagino que me sabías sólo tuya. Las dos botellas de vino dieron resultado, me durmieron durante el acto, primera vez que lo llamo así, no en el acto, durante, que era lo que quería. Medio despierta pude escuchar al final algo que no llegó a ser un quejido, seguido de un gran bostezo y un fuerte suspiro de mi parte.

No sé cuánto tiempo ha pasado, cuántos cuerpos, cuántos pájaros, creo que no ha pasado el invierno, ¿todavía?, ¡que invierno tan largo!, ¡que noches infinitas!, ¡que vacío tan redondo!, ¡que ausencia tan esperada de la enfermedad crónica de tu presencia!, ¡que casa tan embrujada!, que… Ya… Ya… ¡Ya!. Finalmente logro despegar mi pie derecho, arrastro el otro y me voy sin voltear, porque me duele, a limpiar los pasos que te trajeron hasta mí.

18 comentarios:

Anónimo dijo...

me quede pensando en la cancion ... y llegan miles de recuerdos.. mas un par de sencaciones olvidadas...

te sigo visitando ..

Cinzia Ricciuti dijo...

Uy Vero...
que paso mi pequena hada?
Vamos, llora un poquito y levanta esos pies que pronto se van a poner ligeros de nuevo.
Estoy aqui
Un abrazo
Cinzia

...flor deshilvanada dijo...

Dicen que lo más duro es el olvido... lleva tiempo, pero algunos logran olvidar. Yo aún no puedo...

Abrazos Vero!!

Anónimo dijo...

Ya te lo dije, dejalos atras, no intentes limpiarlos que pierdes energia y tiempo. Los nuevos pasos y la distancia te haran verlos diferentes, eso seguro.
Y la otra opcion que te dije simpre mantenla presente!!
jajajaja
JM

Verónica E. Díaz M. dijo...

Irreversible: Me encanta la canción y este es el resultado de escucharlo una y otra vez y dejar volar la imaginación, un poquito pues...

Cinzia: Ya sabes... estoy bien... gracias :-) pudo haber sido en cualquier otro momento

Evan: Es un proceso... van a quedar vagos o sólidos recuerdos según haya sido la experiencia y el tiempo pueda componerlos con distintos tonos

JM: ¿Vas a seguir?...

Abrazos intensos

les dijo...

vero paso de carrerita para dejarte un saludo y un abrazo...

Anónimo dijo...

haré lo posible porque mis pasos permanezcan en ti, y
amor

Carlos dijo...

...auch! que duro...
Ojalá nunca me escriban algo así.

Mmmm...yo usualmente celo de todos...

Lágrimas de Mar dijo...

Bonito relato, el pequeño texto de la canción habla por si solo.
Me gustó tu espacio.
Besos

lágrimas de mar

ficcionesentexto dijo...

no te castigues por mucho mas
que el dolor solo sea el suficiente para aprender la leccion

un saludo y suerte

Unknown dijo...

Hay amiga a mi se me antoja que usted cada vez escribe mejor....

Guao que intenso esto¡

Julio dijo...

Es tan difícil irse de aquello que amamos, tan complicado y doloroso que toma mucho tiempo, pero ya empezaste a caminar, ahora no te detengas.

Animo, te mando un beso

Menta dijo...

Primero gracias por tus visitas a mi rincon y ahora tu post...uff! lo leo y me llega como un grito en pausa,un canto de nostalgia,una ausencia viva tan dolida...
Hermoso texto.

Un abrazo con alma.

Menta

Athos dijo...

No dejes que el desamor te oculte la luz del día Verónika.
Debes quererte a tí misma ante todo.
Besos y ánimo

Verónica E. Díaz M. dijo...

Primero que nada, gracias a todos, siempre es más que grato tenerlos por aquí.

Segundo que nada agradecerles por su preocupación por lo que escribí, pero es solo, como lo dije antes, la alucinación que me produjo el escuchar la bendita canción que me encanta, unas 20 veces en el día y el escrito fue el resultado de tal ociosidad. Gracias de verdad gracias...

Abrazos repetidos

nohayensayo dijo...

Supongo que la gran mayoria, alguna vez, nos hemos sentido así.
Gracias por describirlo tan bonito.

Abrazos!!!
;-)

Caperucita dijo...

mejor atesorar esos pasos sin dolor
gracias x tu vistia

Cristibel dijo...

Me siento tan profundamente identificada, que me sorprendo y me asusto a la vez...

Sólo te digo una cosa: no te quedés ahí, en el umbral de la puerta, mirando las hojas caer. Dejá que el invierno se lleve el dolor, y que nazca en vos la Primavera. Mejores tiempos vendrán sólo si vos lo permitís. Salí a volar de nuevo en tu escoba, y de pronto nos encontraremos camino a la Luna. Un abrazo cófrade.

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